Córdoba.- El cuerpo putrefacto que a principios del presente mes fue localizado en las aguas del río Blanco, en la colonia Úrsulo Galván del municipio de Naranjal, ejecutado y presentando huellas de tortura, ya fue enviado a la fosa común debido a que no fue identificado.
Durante los cinco primeros meses del año, se conoció de manera extraoficial, unos cinco cuerpos han sido enviados a la fosa común luego de permaneces durante varias semanas sin identificar; la mayoría fueron encontrados en diferentes zonas por donde cruza el río Blanco.
Este cadáver, que pertenecía a una persona del sexo masculino, de 30 a 35 años, fue localizado el pasado 5 de mayo atorado en unas rocas del río Blanco, en la colonia Úrsulo Galván, en el lugar conocido como “La Cola del Diablo”.
Al momento del hallazgo, presentaba huellas de haber sido torturado y en un avanzado estado de putrefacción, boca arriba y semidesnudo, informaron en ese entonces autoridades ministeriales y policiacas.
A tres semanas de este hallazgo, las autoridades ministeriales dieron la instrucción de que el cuerpo fuera enviado a una fosa común en el panteón municipal, debido a que no fue identificado en tiempo y forma por algún familiar.
ROMEO REAL PACHIN
EL BUEN TONO