Orizaba.- El mesero que fue ultimado de cinco puñaladas en el interior de su domicilio, fue enviado a la fosa común, al ser identificado pero no reclamado por su sobrina ante las autoridades de la Fiscalía Regional de Estado.
La sobrina del finado, María del Carmen Pérez González, acudió hasta las instalaciones de la dependencia un par de horas después de los hechos para entrevistarse con el fiscal en turno, dando a conocer que era su tío, pero desconocía quiénes eran sus amigos.
Posteriormente, Pérez González se retiró del lugar y no reclamó el cuerpo a fin de darle cristiana sepultura, es por ello que a partir de ese momento se iniciaron los trámites correspondientes para que personal de la funeraria donde permanecía hasta ayer, lo depositara en el panteón municipal.
