Córdoba.- A 10 meses de las inundaciones que dejaron más de 100 damnificados, autoridades municipales siguen sin otorgarles apoyo, a pesar de que sus viviendas y pertenencias fueron devastadas.
Margarita García López, presidenta de la Unión de Colonias en la zona de San Miguelito, dijo que el año pasado las autoridades encabezadas por Tomás Ríos —el alcahuete de Portilla—, no reportaron de manera oportuna al Fondo Nacional de Desastres (Fonden) el siniestro que se registró por las inundaciones, las cuales provocaron la pérdida total de todas las pertenencias de los damnificados.
Por eso motivo, Córdoba no fue declarada zona de desastre por las autoridades federales y no recibieron recursos para canalizarlos a las víctimas.
Recordó que en ese entonces, luego de solicitar a las autoridades en varias ocasiones apoyos por las inundaciones, recibieron por contestación que no había recursos para ellos.
La entrevistada aseguró contar con un documento donde se informa que las autoridades no solicitaron la declaratoria de desastre.
El culpable de no haber tramitado dicho apoyo es el secretario del Ayuntamiento Rodolfo De Gasperín, de quien depende el titular de Protección Civil Carlos Basáñez.
La señora Margarita García dijo que ahora que son menos familias las afectadas por las granizadas, éstas sí recibirán recursos para adquirir láminas y rehabilitar
sus techos.
Los colonos solicitarán por escrito a las autoridades municipales que realicen trabajos de desazolve en el arroyo “Quitacalzones”, el cual el año pasado se desbordó e inundó más de 60 viviendas, dejando a varias familias sin pertenencias.
Existe el temor de los vecinos de las colonias Lázaro Cárdenas, La Sidra, San Isidro, El Pedregal y San Miguelito que la temporada de lluvias nuevamente inunde esas colonias a zona, cuando aún no se han recuperado de las afectaciones del año pasado.