Orizaba.- El obispo electo de Orizaba, Eduardo Cervantes Merino, emitió un mensaje de alegría y gratitud a Dios por el don de la iglesia, “por el de los pastores que ahora me han pedido encabezar este servicio, el ministerio como sucesor de los apóstoles en nuestra Iglesia de Orizaba”.
Lo anterior, tras reunirse con los decanos que se encargan de coordinar las celebraciones de Consagración Episcopal y la toma de posesión de su cátedral el próximo 23 de abril.
Don Eduardo Cervantes Merino reconoció la importancia y gusto por esta fiesta de la Iglesia de Orizaba “y digo nuestra fiesta porque esto es un evento de la Providencia Divina que nos concede vivir y crecer como Iglesia”.
Agradeció a los decanos que han tenido el ánimo y cariño a la Iglesia para preparar este evento, a los sacerdotes de su decanato respectivo que los apoyan y respaldan.
“Sé que detrás de ellos está el equipo de las hermanas religiosas, los laicos comprometidos, la ilusión también de nuestros hermanos seminaristas, y es la Iglesia toda los que estamos caminando en la búsqueda de ser cada vez más signo de la presencia de Dios en el mundo”, expresó.
La preparación de esa fiesta anima a vivir con más alegría la misión de ser discípulos del Señor, “y en este camino del discipulado consolidarnos, unirnos como Iglesia y que viviendo esta comunión podamos ser también signo de la presencia de Dios en el mundo anunciándolo con un compromiso misionero”, dijo en el breve mensaje.
Matilde De los Santos
El Buen Tono