Fortín.- En peligro de extinción se encuentran viveristas de Fortín, quienes pese a ser el motor económico del municipio, han sido abandonados por las autoridades, lo que ha generado que cada vez sean menos las personas que se dedican a la producción de la flor, al ser un rubro poco rentable.
A decir del viverista Evaristo Cortés Salgado, el viverismo, además de ser una de las actividades más importantes en la economía de Fortín, es parte de la identidad del municipio, pues la producción de flores en sus distintos variedades ha sido el atrayente de turistas nacionales y extranjeros.
Sin embargo, la situación económica nacional y la falta de apoyo de las distintas órdenes de Gobierno está impactando a este sector, pues ante la falta de ventas o apoyos a fin de poder mantener latente el negocio, los ha orillado a desaparecer.
Explicó que al igual que el campo, los viveristas comienzan a padecer la falta de esquemas de Gobierno, por lo que urgieron a las autoridades federales crear proyectos que beneficien a este sector, desde económicos hasta en especie.
A nivel local la situación empeora con la falta de la Feria de la Flor, que por segundo año consecutivo no se llevará a cabo y que por años había sido la punta de lanza para viveristas fortinenses, pues era en esa fecha cuando las ventas repuntaban, además de dar a los comerciantes de flores una proyección
internacional.
No obstante y ante el panorama que se vislumbra, el viverismo está en decadencia, incluso, Cortés Salgado lo comparó con la situación que vive el campo, en cuanto a la crisis que se desarrolla.
Un viverista, explicó, llega a tener una venta de alrededor de 3 mil pesos mensuales, muchos deben pagar renta y de ahí sufragar sus gastos diarios, entonces, el dinero no alcanza para replantar o comprar fertilizantes —por ejemplo—, indicó el entrevistado.
Celia DÌaz GarcÌa
El Buen Tono