Adriana Estrada
El Buen Tono
Orizaba.- La muerte de “Skippy”, un canguro único en su especie alojado en la Unidad de Manejo Ambiental (UMA) Citlaltépetl, desató indignación entre organizaciones animalistas y ciudadanos, quienes denuncian condiciones de maltrato y negligencia sistemática en el recinto.
El marsupial, trasladado desde el Estado de México en enero de 2023, falleció este viernes tras ser atacado por lobos, en un incidente que refleja la falta de protocolos profesionales en el cuidado de los animales.
“Skippy” llegó a Orizaba como parte de un intercambio que incluyó a dos leones, y a su llegada, fue alojado en la jaula junto a los hipopótamos del lugar. Sin embargo, hace unas semanas, la hipopótamo “Gloria” y su cría fueron trasladados a ese espacio, lo que obligó a reubicar al canguro en un área junto a lobos.
Una decisión tomada sin considerar el instinto de los lobos, lo que fue “imprudente y letal”.
De acuerdo a fuentes extraoficiales, tras ser reubicado el canguro junto a los lobos, el marsupial se acercó a la reja que divide a ambas jaulas, hecha de fierro y forrada con maya, por lo que el instinto del lobo fue atacar, provocándole un herida a “Skippy”, la cual no fue atendida por el veterinario de la UMA de manera oportuna.
Este no es un caso aislado, pues en las administraciones de “10”, al menos cinco animales han muerto en la UMA Citlaltépetl bajo circunstancias similares: Un mono araña, un dromedario, cocodrilo, tortugas, entre otros.
Ciudadanos y defensores de animales, han denunciado la precariedad en la que viven los animales de la reserva, sin embargo, no hay registros de sanciones o mejoras concretas.
Mientras que, la muerte de “Skippy” no solo expone el fracaso de una institución, sino la urgencia de reformar las políticas de manejo de fauna en México.
