Laura A. García
El Buen Tono
Amatlán.- Habitantes de la calle Aldama, de la colonia San Isidro, de Paraje Nuevo, manifestaron su malestar por el pésimo estado en que quedó la arteria, tras las obras de introducción de agua potable que hizo el ayuntamiento.
Aseguraron que la reparación de la zanja fue deficiente, y dejó el lugar en condiciones peligrosas para todos
Según testimonios, la mañana de ayer, el personal municipal procedió a tapar el orificio que abrieron para la instalación de tuberías; sin embargo, el trabajo fue insuficiente, y dejó la calle en peores condiciones.
Las piedras grandes y escombro que utilizaron para cubrir la excavación no fueron compactados adecuadamente, lo que resultó en un desnivel que supera la altura de un tope convencional.
Los restos de material quedaron esparcidos fuera del lugar, obstruyendo parcialmente el paso.
Expresaron su preocupación por el riesgo que esta situación representa, ya que la calle Aldama, ubicada entre las avenidas Adolfo López Mateos y Benito Juárez, es una vía de circulación frecuente en el lugar.
“Es un peligro para los vehículos, motos y hasta para los peatones. De seguir en esas condiciones, puede haber un percance grave”, comentó uno de los residentes.
