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Internacional.- El debate sobre el futuro de la Fórmula 1 se intensificó tras los comentarios del presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, quien sugirió la posibilidad de reintroducir los motores V10 con combustibles sostenibles en el reglamento más allá de 2026. Sin embargo, la idea no ha sido bien recibida por todos, incluido Max Verstappen, quien considera que este tipo de discusiones deberían manejarse en privado.
“Por supuesto que creo que es una idea muy bonita”, declaró el tricampeón mundial, “pero si es posible o no, eso es obviamente una historia completamente diferente”. Además, criticó la manera en que la FIA ha llevado el tema: “Siempre pienso que es mejor no ventilar tantas cosas. Es mejor intentar resolverlas entre bastidores, eso sería mejor para todos”.
Las declaraciones de Ben Sulayem ocurrieron durante el evento F175 en Londres, donde los equipos presentaron sus decoraciones para la temporada 2025. El presidente de la FIA afirmó que sus palabras han generado “discusiones positivas sobre el futuro del deporte” y que se están evaluando diversas direcciones para el automovilismo, incluyendo el retorno de los V10.
El reglamento técnico de la F1 cambiará en 2026, con unidades V6 híbridas impulsadas por combustible sintético, lo que ha atraído a nuevos fabricantes como Audi y Cadillac. Sin embargo, la propuesta de revivir los motores V10 despierta dudas sobre su viabilidad técnica y económica.
Por otro lado, Verstappen también se pronunció sobre las recientes restricciones de la FIA respecto al uso de palabrotas, ironizando que podría empezar a expresarse en su dialecto local de Limburgo. “Yo solía hacerlo muchas veces durante el karting”, comentó. “Pero sí, estas cosas son muy tontas. Ni siquiera quieres lidiar con cosas así, pero es lo que hay”.
