DE LA REDACCIÓN
EL BUEN TONO
orizaba.- La desvergonzada corrupción del ayuntamiento, encabezada por el inepto alcalde Juan Manuel Diez Francos, mantiene abierto el bar Cantaritos Romantxu, ubicado en la parte trasera del Poliforum Mier y Pesado, a pesar de que el sábado tres jóvenes fueron brutalmente golpeados por personal de seguridad del lugar.
Este establecimiento, que opera con absoluta impunidad, es señalado por ciudadanos como un punto de venta de alcohol a menores de edad. Según denuncias, esta actividad ilícita es avalada por el presidente municipal, quien protege al propietario del negocio, Román Rodríguez, actual director de Comunicación Social, al perdonarle $50 mil en renta mensual.
Además, el lugar opera de manera camaleónica: en el día es un restaurante de nombre Romantxu, pero al llegar la noche se convierte en Cantaritos Bar, donde se realizan eventos con bebidas embriagantes, con la participación de menores de edad.
La indignación de la ciudadanía crece, no solo por los actos de violencia en el lugar, sino por la evidente complicidad entre las autoridades encabezadas por el alcalde y los responsables de este antro. ¿Cuántos más tendrán que ser golpeados o cuántas irregularidades deberán tolerarse antes de su clausura?
