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Internacional.-. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos anunció este martes 21 de enero la reactivación del programa Protocolos de Protección a Migrantes (MPP), conocido como “Quédate en México”. Esta política, que obliga a ciertos solicitantes de asilo a permanecer en México mientras se resuelven sus procesos migratorios en EE.UU., entra en vigor de inmediato.
El secretario interino del DHS, Benjamine Huffman, destacó que esta medida busca reducir la presencia de migrantes en territorio estadounidense y desincentivar nuevas llegadas. Originalmente implementado en 2019 bajo la administración de Donald Trump, el programa había sido suspendido en varias ocasiones durante el mandato de Joe Biden. Sin embargo, una serie de litigios y decisiones judiciales terminaron reactivándolo.
Contexto y Reacciones
Desde su introducción, el MPP ha sido objeto de controversia. Mientras que la administración Biden intentó eliminarlo en múltiples ocasiones, un fallo de la Corte Suprema en junio de 2022 declaró su ilegalidad, permitiendo su cancelación temporal. Sin embargo, Trump, quien inició su campaña para las elecciones de 2024 con promesas de endurecer la seguridad fronteriza, ha retomado esta política.
En paralelo, la administración Trump desactivó la aplicación CBP One, una herramienta promovida por Biden para programar citas migratorias en la frontera. Según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, esta aplicación dejó de operar el 20 de enero de 2025, cancelándose todas las citas programadas.
El presidente Trump también declaró una emergencia nacional en la frontera sur y firmó órdenes ejecutivas para clasificar a cárteles y pandillas como Organizaciones Terroristas Extranjeras, aumentando las sanciones y medidas contra estas agrupaciones.
Respuesta de México
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, rechazó que su país asuma el papel de “tercer país seguro”, una condición que obligaría a acoger indefinidamente a los solicitantes de asilo. Sheinbaum aseguró que su gobierno ofrecerá asistencia humanitaria a los migrantes en territorio mexicano, pero priorizará su repatriación a sus países de origen.
“Nuestra atención es humanitaria, pero buscamos garantizar el retorno de estas personas a sus naciones en el marco de nuestra política migratoria”, afirmó.
La postura del gobierno mexicano refleja una intención de limitar su rol en la implementación del programa, lo que podría tensar las relaciones con Washington.
Implicaciones
El restablecimiento del programa “Quédate en México” marca un giro drástico en la política migratoria de Estados Unidos, destacando el impacto de las decisiones ejecutivas en los flujos migratorios y en las relaciones bilaterales con México. Mientras tanto, miles de migrantes enfrentan un futuro incierto en territorio mexicano.
