Agencias
EU.- Este lunes, Donald Trump se prepara para asumir el cargo como el presidente número 47 de Estados Unidos, culminando su regreso al poder en una ceremonia marcada por un clima ártico que lo llevará a jurar en el interior del Capitolio, al igual que hizo Ronald Reagan en 1985. Este evento no solo es significativo por su contenido simbólico, sino también por el impacto que tiene en la comunidad migrante, que se siente amenazada por las posibles deportaciones masivas que se avecinan bajo su administración. Con 78 años, Trump se convertirá en el jefe de Estado más longevo de la historia estadounidense.
La investidura contará con la presencia de algunas de las figuras más prominentes del país, incluidos los expresidentes Bill Clinton, George W. Bush y Barack Obama, así como de magnates tecnológicos como Elon Musk, Mark Zuckerberg y Jeff Bezos. En su primer día en el cargo, Trump proyecta firmar hasta 100 decretos, entre los que se destacan iniciativas controvertidas relacionadas con políticas migratorias, aranceles a México y Canadá, y medidas que afectarían a la comunidad LGBTQ+, especialmente a personas transgénero.
La jornada comenzó con una ceremonia religiosa a la que asistieron Trump y su esposa, Melania, en una iglesia cercana a la Casa Blanca. Tras este acto, fueron recibidos por Joe Biden y su esposa, Jill, quienes brindaron un saludo cordial y un breve momento de convivencia antes de trasladarse al Capitolio. La llegada de Trump al emblemático edificio está marcada por un contexto histórico, ya que será en el mismo recinto donde en 2021 sus seguidores intentaron interrumpir el proceso democrático. Así, con la mano sobre una biblia familiar, Trump se comprometerá a “proteger la Constitución” y dará paso a su nuevo mandato.