La Secretaría de Desarrollo Agropecuario de Campeche (SDA) reportó la detección de un caso de gusano barrenador del ganado (Cochliomyia hominivorax) en el municipio de Candelaria. El hallazgo ocurrió en el ombligo de un becerro recién nacido proveniente de Guatemala, según informó Ramón Ochoa Peña, titular de la SDA.
Puntos de revisión y prevención activa
En respuesta, la SDA implementó un punto de revisión exhaustiva en el kilómetro 286, cerca de la comunidad El Desengaño, en el entronque de la carretera que conecta Candelaria con Guatemala. Además, la dependencia estatal, en coordinación con el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), lanzó una campaña de información para ganaderos, incluyendo la distribución de kits preventivos en puntos estratégicos como ventanillas, asociaciones ganaderas, ferias y carnicerías.
“La prevención es clave. Exhortamos a los productores a estar alerta y reportar cualquier caso sospechoso, ya que esta enfermedad tiene un tratamiento curativo y no implica cuarentena definitiva”, destacó la SDA en sus redes sociales.
Impacto regional y antecedentes
El gusano barrenador del ganado representa un riesgo significativo para la industria ganadera debido a su capacidad destructiva en animales. El primer caso positivo en México fue detectado el 24 de noviembre de 2024, en Catazajá, Chiapas, en un becerro proveniente de Centroamérica. Este incidente provocó el cierre temporal de la frontera para exportaciones de ganado en pie hacia Estados Unidos, afectando a importantes estados ganaderos como Chihuahua, Sonora y Durango.
Autoridades competentes y protocolo de respuesta
Fuentes de Senasica enfatizaron que la confirmación oficial de estos casos corresponde a laboratorios certificados y debe ser reportada a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA). Advirtieron que el Gobierno de Campeche no tiene la autoridad para validar casos de gusano barrenador ni para emitir reportes oficiales a nivel internacional.
Un llamado a la colaboración
La SDA insiste en la importancia de la colaboración entre ganaderos y autoridades sanitarias para evitar una propagación mayor. Este esfuerzo conjunto busca proteger la salud animal y mitigar el impacto económico que podría generar un brote descontrolado de esta plaga.
El caso de Candelaria subraya la necesidad de reforzar las fronteras sanitarias y mantener un monitoreo constante en regiones vulnerables. La prevención y la detección temprana son las mejores armas contra el gusano barrenador del ganado.