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Nacional.- Entre 2017 y 2023, el 70% de las armas aseguradas en México, cuyo origen fue rastreado, provinieron de estados fronterizos de Estados Unidos como Texas, Arizona y California, según un informe reciente de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF). Este dato subraya la relación directa entre el tráfico de armas y la violencia en territorio mexicano.
Durante 2022 y 2023, la Fiscalía General de la República (FGR) solicitó el rastreo de más de 50 mil armas. De estas, alrededor de 18 mil fueron rastreadas hasta Estados Unidos, concentrándose su origen en los estados mencionados, con un 74% del total distribuido de la siguiente manera:
- Texas: 43%
- Arizona: 22%
- California: 9%
Rutas del tráfico y cárteles involucrados
La ATF identificó tres rutas principales para el tráfico de armas hacia México:
- Arizona-Sonora
- Texas-Tamaulipas/Nuevo León
- Texas-Chihuahua/Guanajuato
Estas rutas coinciden con zonas controladas por los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG), quienes dominan el 81% de las áreas donde se encontraron estas armas.
Armas más comunes y perfil de los traficantes
Entre las armas más rastreadas destacan las pistolas Glock 9 mm, los rifles Century Arms International de 7.62 mm y las pistolas Taurus 9 mm. Aunque muchas de estas armas se venden legalmente en EE. UU., una parte significativa termina en manos de grupos delictivos a través de traficantes transnacionales. Según la ATF, los principales traficantes son hombres blancos estadounidenses, de entre 24 y 34 años, en su mayoría sin antecedentes criminales.
Un recorrido más largo hacia el delito
El informe también revela que, en promedio, las armas traficadas a México tardan 5.4 años en ser utilizadas en hechos delictivos, casi el doble del promedio en Estados Unidos, que es de 2.9 años.
