La policía de Nueva York ha detenido a Sebastián Y.C., un ciudadano guatemalteco de 33 años, tras ser acusado de asesinato e incendio provocado por la presunta quema viva de una mujer en un vagón del metro de la ciudad. El trágico incidente ocurrió el pasado domingo en la línea F, en Coney Island, a primeras horas de la mañana, cuando la víctima, cuya identidad aún no ha sido revelada, fue incendiada por el acusado con un mechero mientras viajaba en el fondo del vagón.
Las imágenes captadas por una cámara de seguridad del metro muestran al detenido observando de manera impasible cómo las llamas consumían a la mujer. La policía aseguró que fue Sebastián Y.C. quien prendió fuego a la ropa de la víctima, sin ofrecer detalles sobre el motivo detrás del ataque. La falta de conocimiento sobre si ambos tenían algún vínculo personal ha generado aún más incertidumbre en torno al caso.
Este suceso ha captado la atención de medios locales e internacionales, especialmente por el contexto político actual en Estados Unidos, en el que la inmigración se encuentra en el centro del debate público. Sebastián Y.C. no solo tiene antecedentes de ingreso ilegal al país, sino que también se encuentra vinculado a un establecimiento de Brooklyn donde se tratan casos de drogadicción. Según fuentes de la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), el acusado había sido deportado en 2018, pero logró regresar a Estados Unidos de manera ilegal en una fecha no especificada.
El acusado fue visto hoy cubierto con un traje blanco mientras era trasladado por las autoridades. En un video que circuló en las redes sociales, Sebastián aparece visiblemente ebrio en otro vagón del metro, aparentemente grabándose mientras expresaba en español: “Tomo mi cerveza y vivo lo que yo soy”, provocando un contraste perturbador con la violencia de sus acciones previas.
Este caso, además de su impacto en la comunidad neoyorquina, se da en un momento crucial para el tema de la inmigración en EE.UU., justo antes de la toma de posesión del presidente electo, Donald Trump, quien ha vinculado repetidamente la inmigración ilegal con la delincuencia y ha prometido implementar la mayor deportación de inmigrantes en la historia del país. La situación de Sebastián Y.C., un inmigrante indocumentado con antecedentes problemáticos, podría alimentar aún más el debate sobre la inmigración y la seguridad en Nueva York y en todo Estados Unidos.
