AGENCIA
Michoacán.- La sierra que conecta a los municipios de Aguililla, Tepalcatepec, Buenavista Tomatlán, Los Reyes, Coalcomán y Cotija, en Michoacán, se ha convertido en un territorio minado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Este grupo criminal, liderado por Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, ha sembrado centenares de explosivos terrestres en brechas y caminos para frenar el avance de sus rivales y dificultar la entrada de las fuerzas de seguridad.
La estrategia del CJNG incluye la colocación de artefactos explosivos en territorios clave como Aguililla y Tepalcatepec, donde mantienen campamentos, narcolaboratorios y bases de operaciones. Según fuentes de seguridad, esta táctica de guerra, aprendida por el cártel mediante entrenamiento con exmilitares colombianos, se inició en 2022 y ha causado múltiples bajas en el Ejército Mexicano.
En localidades como Paredes del Ahogado y Santa María del Oro, la amenaza de las “narcominas” es constante. En estas zonas, recientemente murieron dos militares tras la explosión de uno de estos artefactos. Además, las comunidades conectadas por estas rutas, como Tazumbos, La Ruana y Punta de Agua, son escenario de enfrentamientos entre el CJNG, Los Viagras y Los Caballeros Templarios.
En 2022, el Ejército realizó operativos para desactivar más de 300 explosivos improvisados en un barrido de 6 kilómetros en Naranjo de Chila, tierra natal de “El Mencho”. A pesar de los esfuerzos, el CJNG continúa avanzando mediante alianzas con células locales y empleando tecnologías letales como drones cargados con explosivos, intensificando el terror en la región.
La Tierra Caliente de Michoacán sigue siendo un campo de batalla, donde la lucha por el control territorial pone en riesgo tanto a las fuerzas de seguridad como a la población civil que vive bajo constante amenaza.
