Los tiempos cambian y lo oculto tarde o temprano sale a la luz, lo que aquí se cuenta es la verdad de lo que desde hace muchos años sucede en el municipio de Tepatlaxco y es el sentir de sus habitantes, mismos que hartos de un mal gobierno se dicen unos a otros que esto debe llegar a su fin, a continuación les contaremos que de manera corrupta, ineficaz y ambiciosa han gobernado en Tepatlaxco los últimos dos ex presidentes y el que se encuentra hoy en el poder.
“El Burro” me refiero a José Fernández Castillo, a quien apodó así el pueblo para después apodarlo ‘La Cebra’ pues al llegar al poder era un burro pero se “rayó”, usted entienda esto como parte del humor mexicano, claro que algo tenían de razón pues fue impuesto como candidato del PAN sin tener la preparación básica para gobernar, sólo como estrategia para ganar pues era el primer candidato de la zona serrana y se vanagloriaba prometiendo que ayudaría al máximo a su gente de la parte alta, en especial a Tenejapa, cosa que no cumplió y su humildad se transformó en soberbia, se olvidó de sus orígenes y el bien de su pueblo, terminando su administración sin gloria alguna, dejando a su pueblo sumido en el abandono y permitiendo que quienes lo rodeaban hicieran de la administración pública lo que se les venía en gana, mientras él sin trono ni reina se creía rey por tener la oportunidad de comprar algunos vehículos de uso y unas cuantas tierras para beneficiarse.
Dice el rumor social que José Fernández no supo cómo llegó y menos como se fue, que ni robar sabia, pero de eso se encargaron quienes estuvieron a su alrededor y entre contratistas y funcionarios públicos se llevaron la mayor parte del pastel. Para colmo antes de salir de la Presidencia dejó el camino planchado y devolviendo el favor para un integrante más de la misma familia que controla el Partido Acción Nacional (PAN) desde hace muchos años y del cual hablaremos a continuación.
“El Gordo” me refiero a Fernando Sampieri, a quien así le dicen, no sólo por su peso, sino también porque cae, y es que quiso darse baños de pueblo y durante su administración se dejaba ver chapeando las jardineras del parque y es que no está mal hacerlo pero fue lo único que hizo, pues no gestionó nada, no bajo recurso alguno y promovió una administración gris que pasó sin pena ni gloria, sólo fue para seguir con la herencia familiar pues su hermano Agustín Sampieri había sido presidente y al poner en el poder al antes mencionado José Fernández, el trato era devolverle el hueso a Fernando Sampieri, que no conforme con su trienio pasado, dicen los rumores políticos quiere volverse a postular por el (PAN) para las próximas elecciones, eso si, como dicen en Tepatlaxco son pocos… vergüenza.
“El Feo”, ahora me refiero al actual presidente municipal de Tepatlaxco, Teófilo Chicatto García, quien no sólo toma su alias por su cara o apariencia física, sino que así se ha de sentir pues desde que entró a la Presidencia, a quien conocíamos como conductor de taxis, buena persona y amable, simplemente dejó de existir y pareciera que se escondió como si algo le diera pena, pues comenta la gente que cuando se le busca no se le encuentra jamás en el palacio y siempre sale por la puerta de atrás para no toparse con sus ciudadanos. Su administración se ha visto empañada por tener a un pueblo sin ley en donde nada está debidamente regulado, donde las patrullas funcionan como taxis, donde se engaña a los campesinos y se les despoja de sus bienes con promesas falsas como las que en este medio se denunciaron hace unos días, además de que estando en tiempos modernos no ha hecho nada por mejorar al pueblo, tiene una carretera llena de baches y ni siquiera los que están frente a su casa siguen allí no los manda a tapar al menos con tierra, y hay infinidad de críticas porque sólo apoya a personas que pertenezcan a su partido, es de allí donde surge la frase “se ve se siente que Tepatlaxco no tiene presidente”.
Esto es sólo un fragmento de la verdad de Tepatlaxco un pueblo hermoso lleno de naturaleza que para su mala fortuna cayó en manos de un grupo político que lo ha mantenido en el retraso, pero la gente ya se da cuenta, ya exige y busca rescatar a su pueblo por eso aquí se dice la verdad y es que la verdad no peca pero incomoda, ante lo evidente inconsciente es el que no quiere ver. Aquí las verdades arden.
De la redacción
El Buen Tono
