AGENCIA
Nacional.- El Senado de la República aprobó un aumento en sus comisiones de trabajo, pasando de 50 en la pasada Legislatura a 66 en la actual, lo que implica un aumento significativo en el gasto mensual. Este incremento eleva el costo total de 22.5 millones de pesos a 39.3 millones de pesos mensuales, debido al mayor número de presidencias y secretarías en las comisiones.
Cada presidencia de comisión tiene un costo de 281 mil pesos al mes, mientras que las secretarías ascienden a 150 mil pesos cada una. De forma inédita, algunas comisiones ahora cuentan con hasta siete secretarías, lo que ha elevado considerablemente el gasto.
Con esta expansión, la LXVI Legislatura, dominada por Morena, se posiciona como la de mayor número de comisiones en lo que va del siglo. Comparativamente, las Legislaturas del PRI y PAN oscilaron entre 49 y 59 comisiones, mientras que la última Legislatura también encabezada por Morena redujo el número a 50 como parte de las políticas de austeridad.
En esta ocasión, se han creado comisiones específicas para temas como la Guardia Nacional, Infraestructura Ferroviaria, Inteligencia Artificial, Ganadería y el seguimiento del T-MEC, entre otros. Además, se dividieron funciones que antes compartían comisiones más amplias, como Juventud y Deporte, y Participación Ciudadana, entre otras.
El modelo tradicional de dos secretarías por comisión ha cambiado drásticamente. Actualmente, hay 139 secretarías en total, frente a las 100 que existían hasta 2024. Por ejemplo, las comisiones de Justicia, Relaciones Exteriores y Energía tienen cinco, cinco y siete secretarías respectivamente.
El costo mensual de las 66 presidencias asciende a 18.5 millones de pesos, mientras que las secretarías representan un gasto adicional de 20.8 millones. Aunque no se ha modificado el presupuesto asignado a cada comisión, la creación de más cargos eleva el impacto financiero.
En contraste, durante 2018, Morena aplicó una política de austeridad que incluyó la reducción de asesores, honorarios y otros gastos. Sin embargo, esta nueva configuración legislativa ha revertido parcialmente esas medidas, aumentando significativamente el gasto.
Con estas modificaciones, el Senado enfrenta críticas por el incremento en los costos operativos en un contexto donde se había promovido la austeridad en años recientes.
