Sandra González
EL BUEN TONO
Orizaba.- Tras el asesinato del diputado federal Benito Aguas Atlahua el pasado 9 de diciembre, el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez, calificó el hecho como una evidencia contundente de la crisis de seguridad que atraviesa el estado de Veracruz.
“Por supuesto que siempre impacta el asesinato de una persona, y esto confirma que hay una crisis de violencia en nuestro estado, donde una persona puede ser agredida como sucedió con el caso del diputado; el temor de que, si incluso esto les sucede a funcionarios, pensar en qué puede ocurrir con la gente de la comunidad y el pueblo”, expresó.
Lamentó el clima de inseguridad que afecta a las comunidades, señalando que la violencia genera un estado de temor constante que mantiene prisionera a la población. “Como cada hecho perturbador que se presenta, los casos de violencia siempre causan un temor que mantiene prisioneras a las comunidades, puesto que el hecho de que arrebaten vidas los mantiene intranquilos”, agregó.
Hizo un llamado a las autoridades para esclarecer este asesinato y redoblar los esfuerzos de seguridad. “Es importante que se aclare y que se siga trabajando para fortalecer las estrategias de seguridad y el restablecimiento de paz en el estado, pues así la ciudadanía podrá tener una certeza de bienestar”.
