Un juez de Bogotá sentenció este viernes a Sebastián Hernández y Raúl Murcia a 18 y 20 años de prisión, respectivamente, por su participación en el intento de quemar vivos a 15 policías durante las protestas en Colombia en 2021. Los condenados fueron hallados culpables de los delitos de violencia contra servidor público y terrorismo agravado.
Los hechos
El ataque ocurrió el 4 de mayo de 2021, en el marco del llamado estallido social, un movimiento desencadenado por el proyecto de reforma tributaria del entonces presidente Iván Duque. Un grupo de manifestantes armados con piedras, ladrillos, tubos y bombas incendiarias atacó el Comando de Atención Inmediata (CAI) en el barrio La Aurora, en Bogotá.
Según la Fiscalía, los agresores rompieron los vidrios blindados de la instalación policial y le prendieron fuego mientras 15 policías permanecían en su interior. Además, incendiaron una motocicleta de la Policía colombiana. Durante el juicio, los agentes relataron con angustia cómo solicitaron apoyo mientras temían por sus vidas.
Decisión judicial
En la audiencia realizada hoy, el Juez 5 Penal del Circuito Especializado de Bogotá enfatizó la gravedad de los actos. Sin embargo, absolvió a los acusados de los cargos de daño en bien ajeno y empleo o lanzamiento de sustancias peligrosas.
Contexto del estallido social
Las protestas de 2021, que se extendieron por meses, fueron marcadas por enfrentamientos violentos y denuncias de abusos por parte de las autoridades. Según organizaciones sociales, más de 80 personas murieron de forma violenta durante las manifestaciones, la mayoría debido a acciones policiales.
Esta condena representa un paso en la búsqueda de justicia en medio de un contexto de alta polarización, donde tanto manifestantes como fuerzas del orden han sido señalados por excesos y violaciones a los derechos humanos.