De la Redacción
El Buen Tono
CD. Mendoza.- Empresarios locales denunciaron que en la administración municipal, que preside Héctor Rodríguez Cortés, imperan prácticas indebidas en la asignación de contratos, debido a que los funcionarios exigen moches a cambio de otorgar obras y servicios.
Indicaron que lo anterior es parte de la corrupción que prevalece en el actual Ayuntamiento desde el inicio de sus funciones, a pesar de que ofrecieron todo lo contrario.
Dicho esquema, que pone en duda la transparencia en el uso de recursos públicos, afecta directamente a la competitividad y a los ciudadanos, quienes terminan pagando el precio de tales irregularidades.
Ladrones
De acuerdo con las acusaciones, funcionarios municipales exigen un porcentaje del monto total de los contratos como condición para asignarlos a ciertos proveedores.
Dicho esquema privilegia a quienes acceden a pagar los sobornos, pero también genera un círculo vicioso en el que los trabajos que se entregan suelen ser de menor calidad o incluso quedar inconclusas.
“Las empresas seleccionadas ajustan sus costos para recuperar lo entregado como moche”, explicaron.
Tales prácticas representan un doble golpe para los habitantes de la localidad. Por un lado, las obras públicas, que deberían ser de calidad y beneficiar a la comunidad, terminan siendo deficientes. Por otro, el desvío de recursos merma las finanzas municipales, limitando la capacidad del gobierno para atender necesidades prioritarias.
Reclamo
Ante estos señalamientos, es fundamental que el Ayuntamiento de Ciudad Mendoza rinda cuentas y garantice que los procesos de contratación se realicen con apego a la ley.
Las autoridades deben implementar mecanismos claros y auditables que eviten la discrecionalidad y den prioridad a la calidad de los proyectos sobre los intereses particulares.
Es preocupante que, a pesar de las denuncias, muchos ciudadanos opten por el silencio o por normalizar estas prácticas, perpetuando un sistema que perjudica a todos.
Si no se exige rendición de cuentas, la corrupción seguirá siendo un obstáculo para el desarrollo del municipio, manifestó un activista.
“Los pobladores se comportan como burros domesticados y con su actitud permiten que las autoridades roben sin que nadie las frene”, manifestaron los inconformes con la situación.