AGENCIA
Culiacán, Sinaloa.- La violencia generada por enfrentamientos entre grupos del crimen organizado ha teñido de sangre a la capital sinaloense, dejando un saldo de más de 400 personas asesinadas, más de 100 desaparecidos, cientos de robos de vehículos, asaltos y extorsiones, además de bloqueos carreteros que han paralizado la actividad económica y social en la ciudad.
El empresario Agustín Coppel Luken, presidente honorario de Foro Mar de Cortés, calificó esta crisis de seguridad como un “gran fracaso” de las autoridades en sus tres niveles de gobierno. Durante la inauguración del *Summit 2024: Ciudades con Futuro. Sin Miedo a la Acción*, expresó su preocupación por el impacto que la violencia tiene en la vida cotidiana y en la economía local.
Coppel Luken lamentó que, desde hace dos meses, la ciudad se vacía después de las 7:00 de la noche debido al temor generalizado, condenando a la quiebra a negocios como restaurantes, bares, farmacias y servicios de transporte. “El nivel de violencia e impunidad es intolerable, y el daño al estado es profundo”, afirmó.
El empresario acusó a los tres niveles de gobierno de abandonar su responsabilidad constitucional de perseguir los delitos de manera profesional y enfrentar a la delincuencia. “Esta situación refleja una renuncia de las autoridades a cumplir con su deber”, reprochó enfáticamente.
A pesar del oscuro panorama, Coppel Luken mostró optimismo respecto al potencial de la Región Mar de Cortés para superar estas adversidades y convertirse en un modelo de desarrollo y prosperidad sostenible. Destacó la importancia de la participación ciudadana para enfrentar retos como la violencia, la pobreza y el daño ambiental.
“Ser ciudadano no es solo habitar una ciudad; es asumir la responsabilidad de diseñar y construir un futuro común. Algo nos faltó hacer o no hicimos suficientemente bien para evitar el deterioro de la convivencia pacífica en nuestras ciudades”, reflexionó.
El líder empresarial invitó a los asistentes al evento a dialogar y trabajar en conjunto para construir un mejor porvenir. “Estamos seguros de que nuestras ciudades pueden alcanzar un mejor futuro, aunque sea una tarea difícil, es posible”, concluyó.
La situación en Culiacán pone en evidencia la necesidad de una estrategia efectiva para combatir el crimen organizado y garantizar la seguridad de sus habitantes. Mientras tanto, empresarios, ciudadanos y expertos continúan buscando soluciones para devolver la paz y la estabilidad a una ciudad asediada por la violencia.
