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Secuestros del 2014

Superiberia

Córdoba.- Este año se han registrado alrededor de 30 secuestros e intentos de secuestro en Córdoba y municipios de la región, donde nada han logrado hacer las corporaciones para desalentar la incidencia, aún cuando en enfrentamientos han abatido y detenido a varios autores de estos delitos.

 

Se trata de un delito, que afecta por igual a empresarios, comerciantes, dirigentes cañeros o sus familiares, ex alcaldes o sus familiares, personas adultas o jóvenes, que en su mayoría han sido liberados, pero de otros, simplemente nada se sabe. 

 

En algunos casos, las corporaciones preventivas e investigadoras han logrado rescatar a las víctimas, sanas y salvas, en otros han detenido, e incluso abatido a los responsables, pero eso poco ha servido para desalentar el delito.

 

En el mes de enero empezó la cuenta, con el secuestro de la esposa de un médico en la colonia La Luz Palotal, la cual presuntamente fue sustraída de su casa por varios hombres y una mujer.

 

Estos hechos fueron la tarde del 23 de enero, cuando varios sujetos, llegaron a la residencia del doctor José Manuel Pozos Robledo, donde fingieron que iban a rentar un salón de fiestas, y momentos después secuestraron a su esposa, María Silvia Barriga Angueven. Ese día, grupos de la Secretaría de Marina-Armada de México, iniciaron operativos que de nada sirvieron para dar con el paradero de la mujer y sus captores, quienes habrían pedido la cantidad de cinco millones de pesos para liberarla.

 

Después, el 2 de febrero, sujetos con armas de fuego secuestraron en Loma de Guadalupe, municipio de Yanga al ex alcalde de ese lugar, Gregorio Romero Rincón, hoy prominente propietario de un lote de automóviles, ubicado sobre la carretera federal Córdoba-Veracruz, a la altura de la desviación a Omealca. Seis días después, el también ex secretario general de la Unión Local de Productores de Caña de Azúcar (ULPCA) de la CNC en el ingenio San José de Abajo, fue liberado por sus captores, y retornó a su domicilio, hasta donde horas después llegaron elementos de Seguridad Pública, Agencia Veracruzana de Investigaciones (AVI) y personal de la Secretaría de Marina Armada de México.

 

Posteriormente, el 14 de marzo, un agricultor fue secuestrado por desconocidos que se lo llevaron, tras interceptarlo en la carretera federal Fortín-Huatusco, a la altura de Coscomatepec.

 

Secuestran a un comerciante y taxista Asimismo, el 27 de marzo fue plagiado el comerciante y taxista Rufino Sánchez, propietario de la negociación Estructuras Metálicas Sánchez, y seis días después fue liberado. Rufino Sánchez fue secuestrado por sujetos desconocidos que abordaron su taxi, el 1099, que luego dejaron abandonado cerca de la unidad habitacional San José.

 

Cuando lo soltaron sus captores, entre el gremio taxista se conoció que don Rufino Sánchez, de 58 años, ya había sido liberado sano y salvo, “ya anda trabajando, no sabemos más”, comentaron algunos trabajadores del volante que solicitaron guardar su identidad.

 

Se conoció que el también comerciante, fue dejado en libertad durante la noche de ese lunes y apoyado por un trabajador del volante fue trasladado al domicilio de sus hijos, sin que se diera parte a las autoridades ministeriales o policiacas, las que en todo momento se mantuvieron al margen de la situación.

 

La doctora Malú Patricia Lavín Torres, hermana del ex presidente municipal Juan Antonio Lavín Torres, fue la primera persona secuestrada durante el mes de marzo, luego de ser interceptada por sujetos desconocidos cuando salía de su consultorio de la avenida 7 y calle 12 de la colonia San José; una semana después fue dejada en libertad.

 

El 29 de marzo, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, adscritos a la delegación VII de Fortín, rescataron a una persona secuestrada en la colonia El Rosario, de la calzada Morelos. Asimismo, el 14 de mayo, otras tres personas fueron secuestradas por hombres armados, en los municipios de Córdoba y Paso del Macho.  

 

Días después, el día 29 del mismo mes, fue secuestrado un tapicero de la avenida 9, entre calles 5 y 7 de Córdoba, mismo que posteriormente fue liberado en la ciudad de Nogales. 

 

El caso Mardoniz Libreros

 

El pasado 10 de junio fue plagiado el joven Luis Antonio Mardoniz Libreros, quien es hijo de empresarios gasolineros de Córdoba. Tres días después, grupos de la Marina y Seguridad Pública rescataron al joven, en el camino a San Rafael Calería, donde además las fuerzas del orden mataron a tres de los presuntos secuestradores que iban en un automóvil. Uno de los responsables, resultó ser sobrino de la familia Libreros.

 

Los jóvenes abatidos fueron identificados como Ricardo Moisés González Vera, de 20 años de edad, José Gabriel Cifuentes Zacarías, de 19 años, así como Josemar Rodríguez Gutiérrez, de 28, quien resultó ser sobrino del secuestrado y el cual planeó directamente el secuestro. 

 

Fuentes de corporaciones de seguridad informaron que en el proceso de identificación de los plagiarios, abatidos en el operativo Blindaje Córdoba, se logró establecer que Josemar era sobrino de una de las tías de Luis Ángel, por lo que habría conocido las actividades del joven y su familiares. 

 

Josemar Rodríguez Gutiérrez, conducía un automóvil Seat-Ibiza, gris acompañado por otros 2 sujetos, quienes al ser descubiertos por elementos de la Policía Estatal, en el camino que conduce a la comunidad de El Bajío, dispararon contra los uniformados, por lo que éstos repelieron la agresión y mataron a los individuos. 

 

Josemar habría participado en la planeación y ejecución del secuestro el martes 10 de junio, cuando Luis Ángel llegó a su escuela ubicada en Fortín. Por su relación cercana con la víctima, Josemar conocía sus actividades, así como las empresas y ocupación de sus padres.

 

El día de los hechos el estudiante fue amagado y sometido por sus plagiarios, quienes se lo llevaron ante la mirada de sus compañeros, permaneciendo oculto en una cueva de la sierra del Gallego.

 

A casi tres días del secuestro, fuerzas estatales realizaron labores de inteligencia y aunado a eso, uno de los elementos del Mando Único recordó una cueva que secuestradores habían utilizado meses antes para mantener cautiva a una mujer.

 
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