AGENCIA
Nacional.- La importación de vehículos chinos ha alcanzado niveles sin precedentes en México, saturando los puertos del Pacífico en los últimos dos años y desplazando a India y Brasil como principales proveedores de autos importados. Desde 2022, China lidera el mercado mexicano de importación de vehículos, situación que se aceleró tras la recuperación de la cadena de suministro luego de la pandemia.
Ante la congestión en los puertos del Pacífico, como Lázaro Cárdenas y Mazatlán, los fabricantes chinos han implementado innovaciones logísticas para maximizar la eficiencia de descarga. En lugar de utilizar los barcos Roll-On/Roll-Off (RORO), donde los autos se desembarcan rodando, las marcas optaron por contenedores diseñados para apilar los vehículos verticalmente.
Este nuevo sistema permite que hasta cuatro autos se almacenen en un solo contenedor, maximizando la capacidad de carga y reduciendo el espacio utilizado en los buques. José Ángel Sánchez, vicepresidente de Grupo Chirey, mencionó que esta estrategia fue una de las “creatividades ocultas” surgidas durante el Expansión Summit 2024 México del Futuro, y describió la organización de los puertos como “estructuras de Lego”.
Por su parte, MG Motor ha diversificado sus rutas de importación para mantener el flujo constante de vehículos, optando por descargar en Mazatlán como complemento a Lázaro Cárdenas, el cual sigue siendo el puerto con mayor infraestructura. Este cambio ha generado un aumento significativo en el movimiento de vehículos en ambos puertos. Según la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), de enero a septiembre de este año, Lázaro Cárdenas registró la entrada de 334 mil 608 vehículos, un 5.7 por ciento (%) más que el año anterior, mientras que Mazatlán movilizó 132 mil 180 unidades, un incremento del 30% frente al mismo periodo de 2023.
A pesar del aumento en la importación, el bajo flujo de exportación ha generado un problema logístico de “madrinas” o camiones especializados en transportar vehículos, que a menudo regresan vacíos a los puertos, encareciendo el costo de transporte. Para asegurar la disponibilidad y evitar los aumentos en costos, algunas marcas, como MG, han optado por adquirir sus propios camiones, lo que permite reducir los gastos de transporte y mantener un flujo de importación constante.
Este incremento en la importación de vehículos chinos no solo refleja el cambio en los hábitos de consumo, sino también una transformación en la infraestructura y logística en México para adaptarse al crecimiento del comercio con China y optimizar el flujo vehicular desde los puertos del Pacífico.