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Fortín.- La inseguridad en el municipio alcanzó niveles críticos, con una “ola” alarmante de robos de autos y motocicletas que dejó a la población en un estado de constante temor.
Dicho problema afectó directamente a los dueños de las unidades hurtadas, pero también generó un ambiente de desconfianza y desesperanza entre los habitantes.
“Nos dimos cuenta lo fácil que resulta para los malhechores vulnerar nuestro patrimonio sin que las autoridades municipales actúen para detenerlos, y recuperar lo que nos robaron”, expresaron.
Consideraron que se trata de una irresponsabilidad del edil Gerardo Rosales Victoria, que deja en evidencia su falta de respuesta ante la crisis de inseguridad que enfrentan.
Añadieron que su omisión, que también es corrupción, ante las demandas de los ciudadanos, es inaceptable, “nos deja expuestos a una creciente situación de criminalidad”.
Coludidos
Acusaron que la ausencia de recorridos de las patrullas de Seguridad Pública pone en riesgo la vida y bienes de los habitantes, pero también refleja la complicidad del gobierno local en este tipo de problemas que se generan.
Dijeron que los robos de autos y motocicletas se convirtieron en un fenómeno cotidiano en Fortín de las Flores, “nos dañan mucho, perdemos nuestro medio de transporte, sabemos que la Policía Estatal nunca investiga, y aunque haya denuncias tampoco les dan seguimiento”.
Precisaron que la responsabilidad de Seguridad Pública es implementar estrategias para cuidar a los residentes; sin embargo, lo que hace es permitir la impunidad, la cual favorece a los delincuentes.
Exigieron un cambio inmediato en el área, “Fortín debe dejar de ser un símbolo de la negligencia gubernamental, que cobra altos salarios, pero sin dar resultados que favorezcan a la población que habita en el lugar”.
