Mariana Gutiérrez
El Buen Tono
Río Blanco.- La enfermera auxiliar del Hospital Regional de Río Blanco, Erika Zepeda Reyes, y otras compañeras que tienen especialidades en Pediatría, Enfermería Quirúrgica y Cuidados Paliativos, pidieron apoyo del gobierno federal y estatal para lograr su basificación.
Dijo que requieren ayuda las que aún permanecen como auxiliares, pese a contar con décadas de antigüedad y algunas especializaciones; en su caso lleva más de 25 años de servicio.
Precisó que son unas 120 auxiliares de enfermería que están sin beneficiarse en su totalidad por el proceso de escalafón y homologación, el cual avanzó en etapas desde 2007, pero sin garantizar una regularización completa.
Freno
El principal obstáculo para ellas es la falta de plazas y un candado en la normativa que les impide ingresar al proceso de profesionalización.
“A nivel nacional salió una plataforma de profesionalización, pero al ingresar nuestro CURP y RFC, nos indica que no somos personal de base. Esto nos deja fuera, limitando nuestras oportunidades de crecimiento y mejora salarial”, expresó.
Aunque en etapas previas lograron mejoras salariales y acceso a derechos como ISSSTE, vivienda y préstamos, se mantienen sin modificar su código para avanzar en el escalafón.
“Muchos ya contamos con maestrías, doctorados y especialidades, y hemos asumido roles de supervisión o jefatura, pero seguimos etiquetados como auxiliares, lo cual frena nuestras posibilidades de ascender y obtener una remuneración acorde con nuestras responsabilidades”, añadió.
Hizo notar la incertidumbre que existe entre el personal de enfermería ante la falta de información sobre su situación laboral, especialmente en el contexto de la transición de gobierno y los retrasos en los pagos que afectan al personal de base.
“Nos preocupa que se continúe afectando nuestros derechos, y que no haya una solución definitiva para el cambio de código que requerimos, subrayó Zepeda Reyes.
