La tormenta tropical Trami, conocida localmente como Kristine, ha tocado tierra este jueves en la provincia de Isabela, en la isla de Luzón, al norte de Filipinas. Con vientos sostenidos de 95 km/h y ráfagas que alcanzan los 160 km/h, Trami ha causado severas inundaciones, dejando un saldo de al menos siete personas fallecidas y otras siete desaparecidas, según informaron las autoridades filipinas.
El Consejo Nacional de Gestión y Reducción de Riesgos de Desastres (NDRRMC) ha confirmado que las víctimas se distribuyen entre Luzón, la isla más grande y poblada del país, y el archipiélago de Bisayas, al sur. Las regiones más afectadas incluyen Bicol, Calabarzon e Ilocos, donde continúan las labores de búsqueda de los desaparecidos.
Trami, la undécima tormenta tropical del año en Filipinas, afectó desde el miércoles a más de un millón de personas antes de tocar tierra. Las autoridades emitieron órdenes de evacuación y anunciaron el cierre de escuelas y oficinas públicas, mientras que el ejército participa activamente en las tareas de rescate.
Filipinas, que enfrenta anualmente alrededor de 20 tifones y tormentas tropicales, se encuentra en su temporada de lluvias, la cual se extiende de junio a diciembre. La devastación causada por Trami llega apenas semanas después del paso de Yagi, el tifón más potente de este año en Asia, que en septiembre dejó 21 muertos en Luzón.
Se espera que Trami cruce el norte de Luzón en las próximas horas y que se desplace hacia el oeste, dirigiéndose hacia las aguas de la región de Ilocos.