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Chilpancingo, Guerrero.- La situación de violencia en Guerrero ha alcanzado un nuevo nivel de gravedad tras el asesinato y decapitación del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos. El coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira, afirmó que este acto violento evidencia la falta de control del gobierno estatal y ha solicitado la renuncia de la gobernadora, Evelyn Salgado.
“Lo que sucedió en Chilpancingo refleja que no hay gobierno en Guerrero. Yo creo que Morena debería tomar la decisión de pedirle a la gobernadora que se retire,” declaró Moreira, resaltando que el crimen organizado ha tomado el control en la entidad. “El narcotráfico decide las elecciones en Guerrero, no los ciudadanos,” afirmó, cuestionando la legitimidad de las autoridades locales.
Por su parte, Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobernación, evitó abordar directamente la situación de violencia en Guerrero durante un homenaje a la maestra Ifigenia Martínez. Al ser consultada sobre las acciones que el gobierno federal tomará en respuesta al asesinato de Arcos, Rodríguez se limitó a mencionar que las investigaciones están en curso, evitando profundizar en el tema.