Agencias
México.-Dos días antes de su asesinato, el alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, pidió reforzar la seguridad para él y su equipo a la gobernadora Evelyn Salgado. En una entrevista el 4 de octubre, tras el homicidio de Francisco Tapia, secretario general del ayuntamiento, Arcos enfatizó la importancia de garantizar la seguridad en el municipio, manifestando que su administración siempre había trabajado por la paz y el bienestar de la comunidad.
Arcos, quien asumió el cargo el 30 de septiembre, fue hallado sin vida el 6 de octubre en la colonia Villas del Roble. Su cuerpo, decapitado, fue encontrado dentro de una camioneta, lo que ha generado una condena generalizada y un llamado a la acción por parte de líderes políticos, incluyendo al dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, quien exigió a la Fiscalía General de la República investigar el caso.
La Fiscalía del Estado de Guerrero ha abierto una carpeta de investigación para localizar a los responsables del asesinato. La gobernadora Salgado Pineda también expresó su repudio ante el crimen y ha ordenado aumentar los operativos de seguridad y asistencia social en Chilpancingo.
Además de burlarse de las autoridades, los delincuentes actúan de esta manera porque están coludidos y confiados de que hay acuerdos entre delincuentes y autoridades. Se atreven a llevarlo al pueblo y coronar su asesinato colocando la cabeza en el toldo para exhibirla.
¡Eso es el colmo de la impunidad! ¡No pasa nada! Ni al director de la policía municipal lo cesan, ni al delegado de la SSP de esa región.