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Cómo Katya Echazarreta y José Hernández están cambiando el futuro aeroespacial de México

Superiberia

El pasado domingo en la Ciudad de México, el congreso “Personas Espaciales” reunió a dos figuras históricas del espacio: Katya Echazarreta y José Hernández, los dos astronautas mexicanos que han alcanzado las estrellas. El evento fue un encuentro inspirador donde ambos compartieron sus experiencias fuera del planeta y destacaron la importancia de impulsar el desarrollo de la industria espacial en México.

Una Conversación Inspiradora

Durante el evento, Katya Echazarreta, quien en 2022 realizó su primer viaje espacial a bordo de la misión Blue Origin NS-21, compartió un emotivo momento con José Hernández, quien se convirtió en astronauta de la NASA en 2009 tras 12 intentos. Echazarreta recordó cómo, desde joven, investigó sobre figuras mexicanas que lograron llegar al espacio y encontró en Hernández una gran inspiración.

“Cuando me seleccionan, me dicen que tú fuiste parte de esta historia y que colaboraste con ellos. Por eso me seleccionaron para mi primera misión espacial”, expresó Katya emocionada. La misión de Echazarreta, que duró 10 minutos, la convirtió en la primera mujer mexicana en volar al espacio, un logro que ha utilizado para inspirar a jóvenes con su Fundación Espacial Katya Echazarreta.

El Camino de José Hernández

Por su parte, José Hernández contó la historia detrás de su lucha por llegar al espacio. Su sueño nació cuando tenía 10 años, inspirado por la misión Apolo 17, que vio en televisión en diciembre de 1972. Sin embargo, el camino no fue fácil: fue rechazado por la NASA 11 veces antes de ser aceptado en la misión STS-128, lanzada en agosto de 2009. Hernández enfatizó que su éxito no fue solo suyo, sino de toda una comunidad que lo apoyó. “Los héroes reales fueron mi maestra, mis padres y mi esposa”, destacó.

Un Futuro Espacial para México

Ambos astronautas también reflexionaron sobre los desafíos personales de sus misiones espaciales, recordando los mensajes que dejaron a sus familias en caso de que algo saliera mal. Hernández escribió cartas para sus cinco hijos y su esposa, mientras que Echazarreta bromeó diciendo que dejó sus contraseñas en un papel.

Al concluir el evento, tanto Katya como José resaltaron la importancia de crear nuevas políticas y oportunidades para que los jóvenes mexicanos puedan formar parte de la industria espacial, subrayando que el futuro del país en este campo depende de la inversión y el apoyo al talento joven.

El congreso “Personas Espaciales” no solo fue un espacio para compartir experiencias, sino un recordatorio de que los sueños, aunque difíciles, son posibles con perseverancia y apoyo comunitario. Ambos astronautas dejaron claro que el espacio no es el límite, sino el comienzo de un nuevo capítulo en la historia espacial de México.

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