DE LA REDACCIÓN
EL BUEN TONO
CDMX.- El presidente López Obrador presentó a diputados una ambiciosa iniciativa de reforma a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, con el objetivo de reducir el tráfico ilegal de armas y su uso en homicidios.
Plantea cambios drásticos en la regulación de armas, con más prohibiciones, sanciones y requisitos para su posesión.
La iniciativa se posiciona como una de las más agresivas en los últimos años, para frenar el creciente flujo de armas del crimen organizado y civiles.
Estos son los cambios propuestos:
Se prohíbe la posesión y uso de pistolas de calibres 9 mm, .357, .22’’ Magnum, Hornet y TCM, las cuales, según la reforma, causan un mayor daño en comparación con calibres menores permitidos, como el .380 o el 9 mm short.
Las fiscalías ya no podrán retener como evidencia armas de calibre .50 o superiores, tales como los rifles Barrett, ni armamento pesado como lanzagranadas y lanzacohetes, deberán entregarse al Ejército para evitar que sean recuperadas por delincuentes.
Se tipifica como delito la venta de armas a través del comercio electrónico, paquetería, mensajería o el Servicio Postal Mexicano. Se combate el mercado en línea.
Silenciadores, visores de visión nocturna, designadores láser y miras holográficas o térmicas estarán prohibidos, considerándose exclusivos de las Fuerzas Armadas.
Al registrar un arma, el dueño debe designar a un “heredero” que asumirá la responsabilidad en caso de fallecimiento o ausencia del titular.
Quienes practiquen tiro deportivo o la caza deberán estar inscritos en clubes de tiro acreditados por la Sedena, además de seguir nuevas regulaciones sobre el uso y traslado de sus armas, entre otros.