AGENCIA
Líbano.- Una serie de explosiones casi simultáneas sacudió Líbano este martes, dejando un saldo de 9 muertos y alrededor de 2 mil 750 heridos, 200 de ellos de gravedad. Las explosiones ocurrieron en diferentes partes del país y fueron causadas por aparatos “buscapersonas” utilizados por miembros del grupo armado Hezbolá para comunicarse.
Testigos relataron haber visto humo saliendo de los bolsillos de las víctimas antes de que se produjeran las detonaciones, que sonaban como fuegos artificiales. El incidente comenzó alrededor de las 15:45, hora local, en el sur de Beirut y se extendió a otras zonas de Líbano.
Hezbolá y el gobierno libanés señalaron a Israel como responsable del ataque, afirmando que los aparatos habían sido alterados para contener explosivos. Según un informe de The New York Times, funcionarios de varios países confirmaron que Israel implantó material explosivo en los buscapersonas antes de su llegada a Líbano. Israel, por su parte, no ha emitido comentarios oficiales al respecto.
Las explosiones han generado una crisis en hospitales de todo el país, donde cientos de personas fueron atendidas por heridas en manos y rostros. Entre las víctimas se encuentran el hijo de un parlamentario de Hezbolá y la hija de 10 años de otro miembro del grupo. Además, el embajador de Irán en Líbano, Mojtaba Amani, resultó herido.
Hezbolá ha dependido de estos dispositivos como alternativa a los teléfonos celulares, que consideran vulnerables a ser rastreados por inteligencia israelí. Analistas han señalado que este ataque a la cadena de suministro de hardware no tiene precedentes, y describen el hecho como una grave falla de seguridad para Hezbolá, que se enorgullece de sus medidas estrictas.
Las explosiones ocurren en medio de una creciente tensión entre Israel y Hezbolá, con frecuentes enfrentamientos en la frontera. El gobierno libanés calificó el ataque como una “grave violación de la soberanía”, mientras que Hezbolá prometió una fuerte respuesta.
