Más de un año después de la tragedia del sumergible Titán, la Guardia Costera de Estados Unidos ha hecho pública la primera imagen del submarino siniestrado. La fotografía, presentada en una conferencia de prensa este lunes, muestra el cono de la cola del Titán, que quedó cortado y yace en el fondo del Océano Atlántico tras implosionar a unos 3,800 metros bajo el nivel del mar el 18 de junio de 2023.
Esta reveladora imagen fue capturada durante la búsqueda del submarino el año pasado, cuando los investigadores también estaban trabajando en un video animado que recrea el descenso del Titán al fondo del mar.
En la audiencia del lunes, se escucharon declaraciones de Tony Nissen, ex director de ingeniería de OceanGate, quien destacó una serie de preocupaciones de seguridad en la empresa que aparentemente fueron ignoradas por Stockton Rush, cofundador de OceanGate y operador del Titán. Las investigaciones han mostrado que el Titán sufrió múltiples problemas durante viajes anteriores, incluyendo 70 averías en 2021 y 48 más en 2022.
La tragedia del Titán, que resultó en la muerte de cinco personas, ha tenido un profundo impacto. Entre las víctimas estaban Stockton Rush, el aventurero británico Hamish Harding, el explorador francés Paul-Henri Nargeolet, y dos integrantes de una acomodada familia paquistaní, Shahzada Dawood y su hijo Suleman.
En agosto pasado, la familia de Paul-Henri Nargeolet presentó una demanda por muerte por negligencia de 50 millones de dólares, alegando que la tripulación experimentó “terror y angustia mental” debido a las fallas del sumergible y acusando a OceanGate de negligencia.
Este trágico evento ha puesto en evidencia la importancia de la seguridad en las exploraciones subacuáticas y sigue generando debates y análisis sobre las responsabilidades y fallos en las misiones extremas.
