AGENCIA
Juchitán.- Las intensas lluvias registradas desde la madrugada de hoy en Oaxaca inundaron calles y viviendas en el puerto de Salina Cruz, lo que llevó a las autoridades de la refinería “Antonio Dovalí Jaime” a activar un protocolo de seguridad. Este protocolo se implementó luego de que las zonas al sur de la refinería, donde se ubican las plantas procesadoras de gasolina, se vieran afectadas por las inundaciones.
Como parte de las medidas de seguridad, se bloqueó el acceso a trabajadores y vehículos, afectando a entre 2 mil 500 y 3 mil obreros que realizaban labores de mantenimiento para Pemex, aunque las 28 plantas de la refinería continuaron operando sin contratiempos. Las revisiones en los accesos incluyeron la inspección de vehículos para asegurar que contaran con “mata-chispas” y extinguidores.
La zona sur de la refinería fue aislada, con bloqueos para el tránsito vehicular y peatonal, y el personal de seguridad colocó cintas y supervisó la evacuación de los obreros que laboraban en la construcción de la planta coquizadora.
Las lluvias, que se prolongaron desde las 02:00 hasta las 9:00 horas, también causaron inundaciones en al menos seis colonias del puerto. Luis Miguel Ramírez, delegado del IEEPO, informó que la mayoría de las escuelas de nivel básico suspendieron clases para garantizar la seguridad de los estudiantes.
Este incidente ocurre pocos días después de que una explosión en la refinería, el pasado 7 de septiembre, causada por el desbordamiento de los sistemas de drenaje, provocó la muerte de dos trabajadores y un incendio que cubrió el cielo con humo negro.