De la Redacción
El Buen Tono
Nogales.- Cansados de la corrupción y la impunidad, habitantes de El Encinar corrieron a los policías municipales debido a que forman parte de una red mafiosa que opera en la zona.
“Los echamos de aquí porque pretendían cobrarnos derecho de piso, y no estamos dispuestos a permitirlo”, expresaron los habitantes de la congregación.
Los afectados aseguraron que los gendarmes en lugar de otorgar seguridad, son cómplices de delincuentes que asolan la región.
La situación en el lugar, dijeron, llegó a un punto crítico porque los ciudadanos perdieron la confianza en las autoridades municipales.
Subrayaron que a pesar de que el presidente municipal, Ernesto Torres Navarro, conoce la situación, se niega a intervenir, por lo que ellos tuvieron que actuar en consecuencia.
Afirmaron que todos conocen los nexos de los uniformados con la delincuencia, lo que generó un clima de inseguridad constante en el lugar.
Fracaso
A pesar de los intentos de las autoridades municipales por minimizar los hechos, los pobladores se mantienen firmes en su decisión de impedir que la corrupción impere en la comunidad.
“Si a ellos les falta capacidad para garantizar nuestra seguridad, nosotros lo haremos”, sentenciaron.
Advirtieron que impedirán que los elementos ingresen al lugar por la noche para amenazar a los ciudadanos, “todos nos conocemos y sabemos a qué nos dedicamos, así como que la Policía Municipal está podrida. Además de que se vendió con la mafia”.
Rateros
Hicieron notar que Torres Navarro tiene un desorden en la corporación, “están coludidos con la Policía Estatal, por lo que, en lugar de proteger y servir a la población, se dedican a ‘trabajar como ladrones”.
El sábado pasado dos policías recorrían calles de la colonia 30 de Mayo porque dijeron que recibieron una llamada al número de emergencia 911 de que había detonaciones de arma de fuego; los residentes desmintieron el hecho, tras golpearlos y desarmarlos.
