Agencias
Veracruz.- El PAN en Veracruz enfrenta una crisis interna significativa, exacerbada por la reciente destitución del tesorero Mizraim Eligio Castelán, y las crecientes acusaciones de manejo irregular de las prerrogativas y la existencia de “aviadores” en la nómina. Desde la derrota electoral del 2 de junio, el partido ha sufrido un colapso financiero y político, que ha llevado a una serie de enfrentamientos y acusaciones entre sus miembros. Esta situación ha generado un ambiente tenso, con acusaciones de mal manejo de fondos y una posible estrategia para desgastar al personal del Comité Directivo Estatal (CDE).
El conflicto interno ha llevado a propuestas de resistencia pacífica por parte de los trabajadores afectados, quienes consideran hacer visibles sus demandas y presionar a los dirigentes del CDE mediante protestas en sus domicilios. Esta acción busca evitar la repetición de prácticas pasadas en las que los empleados no reciben liquidaciones justas. Con las elecciones municipales próximas y la necesidad de pagar deudas, la crisis financiera del PAN podría empeorar si no se resuelven estos conflictos internos de manera efectiva.
A pesar de la tormenta en el PAN, en Boca del Río el alcalde Juan Manuel Unanue destaca por su gestión positiva. Ha entregado importantes obras públicas, como equipos de aire acondicionado a escuelas, y ha proporcionado apoyos materiales a adultos mayores. Además, en Medellín de Bravo, la asociación civil “Memo AC”, dirigida por Guillermo Herrada Jiménez, ofrece servicios de salud visual a familias de escasos recursos, demostrando un compromiso con el bienestar comunitario sin involucrarse en disputas políticas.