Subtítulo: La justicia francesa enfrenta a Durov con graves acusaciones mientras se le concede libertad bajo fianza
El fundador de Telegram, Pavel Durov, se encuentra en el centro de una tormenta legal en Francia. Este miércoles, la justicia francesa imputó al multimillonario ruso de 39 años con una serie de cargos vinculados al crimen organizado, pero le concedió la libertad bajo fianza. La fianza, establecida en 5 millones de euros, viene acompañada de estrictas condiciones: Durov deberá presentarse dos veces por semana ante la policía y está prohibido de abandonar el territorio francés.
La fiscal de París, Laure Beccuau, declaró que el juez encontró suficientes motivos para proceder con una investigación formal sobre los cargos por los que Durov fue detenido el pasado sábado en el aeropuerto de Le Bourget, al norte de París. Las acusaciones en su contra incluyen complicidad en la administración de una plataforma en línea para facilitar transacciones ilícitas en banda organizada, un delito que podría acarrear hasta 10 años de prisión. Además, enfrenta cargos por rechazo a cooperar con las autoridades en las interceptaciones legales, blanqueo de crímenes y complicidad en la distribución de imágenes de pornografía infantil, narcotráfico, estafa en banda organizada y asociación de malhechores, entre otros.
La defensa de Durov se mantiene firme en su postura. El abogado David-Olivier Kaminski, junto con su colega Julia Bettach, argumenta que es “absurdo” responsabilizar al propietario de una plataforma como Telegram por los abusos cometidos a través de ella. Según la defensa, Telegram cumple con las leyes de la Unión Europea y sigue normas similares a las de otras redes sociales.
Telegram, con 900 millones de usuarios, se ha presentado como una alternativa a las plataformas estadounidenses criticadas por la explotación comercial de datos personales. Sin embargo, sus detractores acusan a la plataforma de albergar contenidos ilegales, incluyendo imágenes extremas, desinformación y servicios de compra de drogas.
La situación se complica aún más con una nueva investigación en Francia por “violencia grave” contra uno de los hijos de Durov, un caso que añade más tensión al ya complejo panorama judicial del empresario.
El apoyo hacia Durov no ha faltado, recibiendo respaldo de figuras destacadas como Elon Musk, jefe de la red social X, y Edward Snowden, el famoso denunciante estadounidense. A pesar de las tensiones diplomáticas y las advertencias de Moscú, el presidente francés Emmanuel Macron ha asegurado que la detención no tiene motivaciones políticas.
Durov, quien ha vivido en Dubái y posee pasaporte francés, ha generado especulaciones sobre los motivos y circunstancias de su detención, así como sobre su viaje a París a pesar de las ordenes de detención. La situación sigue en desarrollo y las próximas semanas podrían ser decisivas para el futuro del fundador de Telegram.
