En un ambiente de tensión y resistencia, miles de venezolanos tomaron las calles de Caracas el pasado sábado, ondeando banderas y mostrando copias de las actas de votación. Estas actas, emitidas por las máquinas electorales, son la clave del reclamo de la oposición, liderada por María Corina Machado, para denunciar el presunto fraude en las elecciones del 28 de julio, en las que Nicolás Maduro fue proclamado reelecto.
Machado, quien salió de la clandestinidad para encabezar la “Gran protesta por la verdad”, afirmó que posee copias del 80% de las actas que demuestran la victoria del opositor Edmundo González Urrutia. “No vamos a dejar las calles”, expresó, enfatizando que la protesta pacífica es un derecho.
La oposición ha denunciado una ola de represión tras los comicios, incluyendo la detención de dirigentes políticos, un sacerdote y un abogado defensor de derechos humanos. A pesar de la adversidad, el espíritu de lucha de los manifestantes sigue vivo, con un mensaje claro: “La voz del pueblo se respeta”.
El ambiente en Venezuela es de creciente incertidumbre y desafío, mientras la oposición se mantiene firme en su intento de desmontar los resultados oficiales.