Después de una pausa de ocho años, un grupo de arqueólogos peruanos ha reanudado las investigaciones en Machu Picchu para evaluar el estado de conservación de este emblemático monumento inca. El Ministerio de Cultura anunció este miércoles el reinicio de los trabajos, destacando la importancia de estos estudios para preservar la herencia cultural de la ciudadela.
Desde el 5 de agosto, un equipo dirigido por el arqueólogo Régulo Franco, con una inversión aproximada de 100,000 soles (equivalente a 26,700 dólares o 24,200 euros), ha comenzado a trabajar en la caracterización de los espacios abiertos de la plaza principal y la plaza hundida en el sector III de Machu Picchu. Este proyecto forma parte del “Programa de Investigaciones Arqueológicas e Interdisciplinarias con fines de Conservación y Puesta en Valor en el Santuario Histórico de Machu Picchu 2019 – 2024”, que abarca 19 monumentos arqueológicos y varios sectores del santuario.
El Ministerio de Cultura detalló que las investigaciones tienen varios objetivos, incluyendo la generación de nuevos datos sobre los procesos constructivos y el estado de conservación de las estructuras y materiales culturales. Aseguraron que los trabajos no interferirán con el desarrollo normal de las visitas turísticas, que seguirán los circuitos y aforos establecidos.
Este proyecto, bajo la supervisión de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco y la Dirección del Parque Arqueológico Nacional de Machu Picchu, busca fomentar el respeto por la conservación y autenticidad del monumento. Los arqueólogos esperan que estos estudios proporcionen información valiosa para preservar y valorizar aún más el legado histórico de Machu Picchu.