El estrés es una respuesta natural a los desafíos de la vida diaria, pero cuando se vuelve constante, puede afectar gravemente la salud física y mental. Aunque no siempre es posible evitar situaciones estresantes, existen formas efectivas de manejarlas y promover el bienestar. Una de ellas es la “respuesta de relajación”, una técnica desarrollada en la década de 1970 en la Escuela de Medicina de Harvard por el cardiólogo Herbert Benson.
La respuesta de relajación es lo opuesto a la respuesta al estrés. Se trata de un estado de descanso profundo que, con práctica regular, puede convertirse en un recurso de calma para momentos de necesidad. Aquí te presentamos seis técnicas de relajación recomendadas por la Escuela de Medicina de Harvard que te ayudarán a reducir el estrés y mejorar tu calidad de vida.
1. Concentración en la respiración
Una técnica simple pero poderosa. Consiste en realizar respiraciones profundas y lentas, enfocándose en el movimiento del abdomen. Al hacerlo, la mente se desvía suavemente de pensamientos y sensaciones que generan estrés. Es particularmente útil para personas con trastornos alimenticios, ya que promueve una conexión más positiva con el cuerpo. Sin embargo, no es recomendable para quienes tienen dificultades respiratorias o insuficiencia cardíaca.
2. Escáner corporal
Combina la respiración profunda con la relajación muscular progresiva. Se trata de concentrarse en diferentes partes del cuerpo y liberar la tensión acumulada. Esta técnica aumenta la conciencia de la conexión entre mente y cuerpo, aunque puede ser menos efectiva para quienes han tenido cirugías recientes que afecten su imagen corporal.
3. Imágenes guiadas
Imagina lugares o experiencias relajantes que te ayuden a desconectarte del estrés. Puedes encontrar aplicaciones y grabaciones en línea para guiarte en este proceso. La clave es elegir imágenes que te generen calma y tengan un significado personal. Aunque esta técnica puede ser difícil para quienes tienen pensamientos intrusivos, es excelente para reforzar una visión positiva de uno mismo.
4. Meditación de mindfulness
Esta práctica implica sentarse en una posición cómoda, concentrarse en la respiración y llevar la atención al momento presente. La meditación de mindfulness ha ganado popularidad por sus beneficios para personas con ansiedad, depresión y dolor crónico. Esta técnica te ayuda a despejar la mente de preocupaciones sobre el pasado o el futuro.
5. Yoga, tai chi y qigong
Estas antiguas disciplinas combinan la respiración rítmica con movimientos fluidos. Además de ser una excelente técnica de relajación, ayudan a mejorar la flexibilidad y el equilibrio. Sin embargo, pueden ser desafiantes para quienes no son físicamente activos o tienen problemas de salud.
6. Oración repetitiva
Repetir en silencio una breve oración o frase mientras te concentras en la respiración es una técnica efectiva para quienes encuentran consuelo en la espiritualidad o la religión. Esta práctica te conecta con un sentido de paz interior, disminuyendo la tensión.
Conclusión
Explora y prueba estas técnicas para encontrar la que mejor se adapte a ti. Los expertos recomiendan dedicar al menos 20 minutos al día a la práctica de la relajación. Cuanto más tiempo y frecuencia inviertas en estas técnicas, mayores serán los beneficios para tu salud y bienestar. ¡Respira profundo y olvídate del estrés!