AGENCIA
Michoacán.- El sacerdote Gregorio López Gerónimo, conocido como el padre Goyo, lanzó fuertes acusaciones contra el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, a quien calificó como “el más grande criminal” del estado. En una entrevista con el periodista José “Pepe” Cárdenas, de Grupo Fórmula, el padre Goyo denunció la presunta complicidad del gobierno estatal con el crimen organizado.
La entrevista, reportada por el medio Monitor Expresso, surgió después de que la asociación El Buen Samaritano, dirigida por el padre Goyo, emitiera un comunicado sobre la grave situación de violencia en la región de Tierra Caliente, Michoacán. El sacerdote criticó la falta de acciones efectivas por parte del gobierno estatal para erradicar el crimen organizado, que afecta gravemente a los productores de limón en la zona.
“El problema que tenemos en Tierra Caliente y en todo el estado de Michoacán de fondo está el mismo gobierno…, el problema que tenemos hoy en Michoacán es el narcogobierno, las alianzas que han pactado con los grupos criminales”, afirmó el padre Goyo.
El sacerdote también desestimó los esfuerzos de vigilancia impulsados por el estado, calificándolos como un “teatro”, y denunció que las autoridades no abordan el problema de fondo. Además, señaló que los responsables de la muerte del exautodefensa Hipólito Mora continúan operando impunemente, cometiendo asesinatos, secuestros y desapariciones en la región.
En su denuncia, el padre Goyo enfatizó la responsabilidad del gobernador Ramírez Bedolla, a quien acusó de ordenar la liberación de criminales previamente detenidos. “Es uno de los delincuentes más grandes que tenemos en el estado de Michoacán, es el jefe de los delincuentes”, declaró.
El padre Goyo también expresó temor por su seguridad, al afirmar que es visto como enemigo por Ramírez Bedolla. Cabe destacar que no es la primera vez que el sacerdote acusa al gobernador; en 2023, lo responsabilizó por la muerte de Hipólito Mora y lo acusó de apoyar al grupo criminal Los Viagras.
Estas declaraciones subrayan la tensa situación en Michoacán y la preocupación creciente por la presunta connivencia entre el gobierno y el crimen organizado.
