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Streamer australiano rompe récord mundial sin dormir

Superiberia

En el mundo digital, los retos extremos de los creadores de contenido son cada vez más comunes, y la última hazaña protagonizada por un streamer australiano ha captado la atención mundial. Norme, un joven de aproximadamente 20 años, se embarcó en un intento audaz para romper el récord mundial de no dormir durante 12 días. Lo que comenzó como un desafío en YouTube se transformó en una serie de eventos dramáticos que incluyeron la intervención de la policía.

Norme inició su maratón de 11 días sin descanso con la intención de documentar cada momento en vivo para validar su récord. Sin embargo, su transmisión en YouTube fue interrumpida abruptamente, probablemente debido a la sensibilidad del contenido. Determinado a continuar, el streamer trasladó su reto a Twitch y, tras enfrentar nuevos problemas en esta plataforma, finalmente se mudó a Rumble para seguir con su desafío.

La situación tomó un giro inesperado cuando, en medio de su maratón, la policía y varias ambulancias llegaron a su domicilio. La intervención se debió a preocupaciones sobre su salud y seguridad, ya que su comportamiento extremado durante el reto despertó alarma entre las autoridades y los profesionales de salud.

A pesar de la presencia de los oficiales y los paramédicos, Norme continuó con su desafío frente a las cámaras, mostrando una increíble determinación para lograr su objetivo. Después de un total de 264 horas y 24 minutos sin dormir, equivalentes a aproximadamente 11 días, Norme decidió terminar su reto. Aunque logró superar el récord mundial de no dormir, su intento de obtener la certificación oficial de Guinness quedó en suspenso debido a las complicaciones.

Este evento resalta hasta dónde pueden llegar los creadores de contenido en busca de fama y récords, y plantea preguntas sobre los límites de la seguridad personal en la búsqueda de la viralidad.

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