Agencias
México.- En julio, la inflación anual en México se elevó a 5.57%, superando el 4.98% registrado en junio y el pronóstico de analistas. El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) creció un 1.05% mensual, la tasa más alta desde julio de 2015. Este incremento se debe principalmente a los aumentos en los precios de alimentos clave como el jitomate (33.34%), el gas doméstico (6.70%) y la naranja (18.57%).
El índice subyacente, que refleja la tendencia a largo plazo de los precios, subió un 0.32% mensual y un 4.05% anual, ligeramente por encima de las expectativas. En contraste, el índice no subyacente, que incluye precios volátiles como los agropecuarios y energéticos, mostró un aumento del 3.29% mensual y un 10.36% anual, la mayor variación desde 1988. Los precios de productos agropecuarios subieron un 5% en un solo mes, mientras que los energéticos y tarifas gubernamentales aumentaron un 1.69%.
A pesar de estas presiones, algunos analistas, como los de Grupo Financiero Banorte, prevén que la inflación podría moderarse en la segunda mitad del año, impulsada por una posible mejora en los precios subyacentes y un menor dinamismo económico. La última reunión de política monetaria del Banco de México podría reflejar estas expectativas con un posible recorte en la tasa de interés.