El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, bajo control del régimen de Nicolás Maduro, ha solicitado al Consejo Nacional Electoral (CNE) la entrega inmediata de las actas de escrutinio de las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio. Esta medida surge en medio de denuncias de fraude tanto por parte de la oposición como de la comunidad internacional.
La presidenta del TSJ, Caryslia Rodríguez, detalló en un comunicado oficial la solicitud de documentos clave, incluyendo las actas de escrutinio y totalización, además del acta de adjudicación y proclamación de Maduro. También se requirió toda evidencia relacionada con un supuesto ataque cibernético al sistema del CNE, el cual ha sido utilizado como justificación para retrasar la publicación completa de los resultados.
La intervención del TSJ ha sido criticada por la oposición, que argumenta que esta medida excede las competencias del tribunal y podría socavar aún más la credibilidad del proceso electoral. Gerardo Blyde, jefe negociador de la oposición, calificó la proclamación de Maduro como “nula” debido a la falta de totalización de las actas por parte del CNE, cuestionando la legitimidad del proceso y del propio TSJ en este contexto.
Mientras tanto, el CNE ratificó a Maduro con el 52% de los votos, frente al 43% del candidato opositor Edmundo González Urrutia, apoyado por la líder opositora María Corina Machado. Sin embargo, la falta de resultados detallados ha intensificado las sospechas de fraude.
Este conflicto evidencia la profunda crisis política en Venezuela y plantea serias dudas sobre la transparencia y legitimidad del proceso electoral en el país.