Agencias
EU.- El secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, admitió que el Servicio Secreto identificó un tejado como un posible riesgo de seguridad días antes del mitin en Butler, Pensilvania, donde intentaron asesinar al expresidente y candidato republicano Donald Trump. A pesar de esta advertencia, el tejado, ubicado a 135 metros del evento y fuera del perímetro de seguridad, no fue asegurado adecuadamente.
Durante el mitin, un joven de 20 años disparó desde el tejado, hiriendo a Trump en una oreja antes de ser abatido por francotiradores del Servicio Secreto. Mayorkas calificó el incidente como un “fallo” de seguridad, y la responsabilidad de la vigilancia del edificio ha sido objeto de disputa entre el Servicio Secreto y las autoridades locales.
Tras el ataque, el senador Ted Cruz pidió la dimisión de Kimberly Cheatle, directora del Servicio Secreto, mientras que el congresista James Comer anunció que citará a Cheatle a declarar ante el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes. Cheatle ha ordenado cambios en el esquema de seguridad de Trump como respuesta al incidente.