Redacción EBT
Veracruz .- En Tlaquilpa, Veracruz, pastores de la región viven momentos de gran preocupación e incertidumbre debido a una serie de misteriosas matanzas de sus borregos. Los animales han sido encontrados despedazados y con la sangre succionada, sin que el agresor consuma la carne, lo que ha llevado a revivir la leyenda del “Chupacabras”.
Pastores de la comunidad de Quetzapotitla, quienes prefirieron mantenerse en el anonimato, relataron que otros compañeros han experimentado situaciones similares en el pasado. En aquellos casos, los borregos aparecían con marcas de dientes en sus cuellos y completamente desangrados. Estos ataques no solo representan una pérdida económica significativa, sino que también impiden a los pastores aprovechar la lana para sus actividades artesanales.
Los propietarios de los borregos afectados han exigido a las autoridades que investiguen estos incidentes, ya que los ataques están poniendo en peligro su sustento y patrimonio familiar. La comunidad espera una pronta respuesta para esclarecer el misterio y proteger su ganado de futuras matanzas.
