De la Redacción
El Buen Tono
córdoba.- Se llevó a cabo una manifestación en el Campestre, donde familiares y amigos de Arantxa Penagos exigen la devolución del pequeño Lázaro Gabriel, de dos años, retenido por Miguel Jiménez García, hijo de los dueños de Jugos California.
A pesar de que un juez federal ya ha ordenado la devolución del menor, la familia se niega a cumplir con el mandato judicial.
La abuela paterna del niño, utilizando mentiras y argucias legales, obtuvo la custodia a través de un juez local, reteniéndolo ilegalmente desde hace un mes, cuando ella ni si quiera sabe cambiar un pañal y no educó ni a sus hijos adecuadamente, además de que tampoco hace de comer.
La abuela anda mandando cadenas de oraciones invocando a la corte celestial por WhatsApp, mientras le roba el bebé a su ex nuera con el pretexto de que un juez “comprado” se lo dio en resguardo.
ORDEN FEDERAL
Sin embargo, un juez federal dejó sin efecto dicho resguardo, ordenando a la mujer entregar el bebé a su mamá, pero en lugar de cumplir una orden federal se pone a pedir rezos.
“Ella (la abuela) no sabe hacer nada de nada. Es una buena para nada, sólo heredó un negocio que ahorita lo están desfalcando con todo esto, se hace la muy santa, utiliza al niño para ella lavarse las manos y no lo quiere entregar”, afirmó Arantxa Penagos.
Este día (ayer), Miguel Jiménez García no fue a la audiencia porque un psiquiatra dijo que no estaba en condiciones de ir por que estaba deprimido, en mal estado, adelgazando, sin concentrarse, cuando la realidad es otra.
