Agencias
México.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, calificó de “mentiroso y corrupto” al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) tras ser acusado de vulnerar principios constitucionales en la elección del 2 de junio. Según el TEPJF, el presidente habría coaccionado el voto, usado recursos públicos indebidamente y difundido propaganda gubernamental en periodo prohibido. López Obrador cuestionó las acusaciones y pidió pruebas durante su conferencia matutina, negando cualquier campaña en favor de Claudia Sheinbaum, la candidata oficialista.
El Tribunal determinó que López Obrador vulneró principios de imparcialidad y neutralidad, y que Claudia Sheinbaum, la presidenta electa, también realizó manifestaciones relacionadas con los comentarios del presidente. Aunque López Obrador no puede ser castigado como presidente, Sheinbaum podría enfrentar sanciones por parte del Congreso de la Ciudad de México. El presidente insistió en que las acusaciones son falsas y están manipuladas por el “conservadurismo” y la prensa.
En respuesta a las acusaciones, López Obrador criticó a la periodista Anabel Hernández y denunció una campaña mediática en su contra, afirmando que estas polémicas forman parte de una corriente conservadora caracterizada por hipocresía, corrupción y autoritarismo. El presidente aseguró que dejará el Palacio Nacional el 1 de octubre, reafirmando su postura de que las acusaciones carecen de fundamento.