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Exjefes de Estado de 23 países, agrupados en la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), expresaron su firme rechazo a la propuesta de reforma al Poder Judicial en México. Argumentaron que dicha iniciativa podría comprometer la independencia de jueces y magistrados, poniendo en riesgo los derechos humanos y libertades fundamentales.En un comunicado, los exmandatarios subrayaron su preocupación por cualquier intento que debilite la autonomía de los jueces y magistrados del Poder Judicial mexicano, incluido el Tribunal Electoral.
Criticaron específicamente la propuesta de implementar elecciones populares para la selección de estos cargos, alertando sobre el riesgo de influencias políticas que podrían comprometer la imparcialidad judicial y transformarla en una herramienta sujeta a interpretaciones subjetivas.
Los exjefes de Estado advirtieron que esta iniciativa de reforma podría servir a propósitos ideológicos específicos, facilitar la aplicación de conceptos como el derecho penal del enemigo y abrir la puerta a la reelección indefinida de los gobernantes.
Frente a este panorama, hicieron un llamado urgente a un diálogo abierto y constructivo entre todos los actores políticos, subrayando la importancia de abordar cualquier necesidad de reforma judicial respetando los principios democráticos como piedra angular de cualquier cambio legislativo.“Una reforma que implique el debilitamiento y desmantelamiento del Poder Judicial representa un atentado grave contra la democracia y la vigencia de un orden constitucional”, aseguraron los exmandatarios. Finalmente, enfatizaron que cualquier intento de debilitar o desmantelar el Poder Judicial constituirá una grave amenaza para la democracia y la estabilidad del orden constitucional en la región.
