Agencias
México.- La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), bajo el liderazgo del general Luis Cresencio Sandoval González, está en proceso de adquirir 5 mil lanzacohetes destinados originalmente para el uso militar en operaciones de guerra. Estos dispositivos, ahora considerados para ser empleados contra la delincuencia organizada, forman parte de la licitación LA-07-110-007000999-I-533-2024. Se trata de lanzacohetes individuales portátiles, equipados con munición integrada de calibre 70mm+-20 mm, capaces de penetrar acero endurecido con un mínimo de 300 mm y alcanzar hasta 500 metros de distancia.
La decisión de adquirir este armamento responde a la necesidad de enfrentar a grupos criminales como los cárteles de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación, Golfo, Noreste, Zetas y Viagras, quienes han aumentado su capacidad defensiva con vehículos blindados avanzados. Esta medida pretende fortalecer las capacidades operativas de la Sedena en situaciones críticas o para establecer defensas efectivas contra tales amenazas.
Aunque diseñados para contextos de guerra convencional, la adquisición de estos lanzacohetes subraya la importancia estratégica de mantener una superioridad en equipamiento frente a las organizaciones criminales, cuyo poderío bélico y logístico ha ido en aumento. La inversión proyectada alcanza hasta 420 millones de pesos, reflejando la seriedad con la que las autoridades mexicanas enfrentan los desafíos derivados de la creciente violencia y la sofisticación de los grupos delictivos en el país.
Esta iniciativa busca no solo preparar a las Fuerzas Armadas para enfrentamientos potenciales de alta intensidad, sino también para asegurar un balance estratégico que permita contener y reducir la influencia criminal en diversas regiones de México.
