De la Redacción
El Buen Tono
Región.- La ruptura del acueducto Dos Arroyos, que conecta Nogales con Córdoba, ha dejado sin agua a miles de habitantes en Fortín, Córdoba, Orizaba y Río Blanco. Esta grave crisis, provocada por la evidente corrupción y negligencia de Hidrosistema al no realizar el mantenimiento necesario a la red de suministro, ha desatado la ira y preocupación de cientos de familias.
La corrupción de esta paramunicipal ha llevado a una situación insostenible, en la que los responsables ni siquiera han tenido la decencia de enfrentar a la ciudadanía para informar sobre el tiempo estimado para restablecer el servicio.
El temor crece entre los habitantes, quienes prevén que la falta del vital líquido podría extenderse hasta mediados de la próxima semana. La situación es alarmante para aquellos que no lograron almacenar agua a tiempo, y cuyas reservas se están agotando rápidamente.
En Río Blanco, la situación es crítica. Los residentes de la colonia Modelo denuncian que desde el viernes 28 de junio no tienen agua potable, debido a las obras de reparación que realiza Hidrosistema de Córdoba.
Esta situación no es aislada; en Orizaba, las colonias Cidosa, Carlos Marx, Librado Rivera, Benito Juárez, Rincón Grande, Rincón Chico, Palmeras y Barrio Nuevo, también sufren la suspensión del servicio. Y en Fortín, más de 30 colonias padecen la misma crisis.
Córdoba expuso la gravedad de la situación, exhortando a la población a racionar el consumo de agua, pues toda la ciudad estará sin el servicio.
Esta situación es un claro reflejo de la corrupción y la mala gestión que prevalecen en Hidrosistema, que está afectando gravemente la calidad de vida de los pobladores.
